jueves, 1 de mayo de 2008

Notas tristes del Primero de Mayo

En una de las varias concentraciones o manifestaciones que han tenido lugar esta mañana en la ciudad, el Barón ha podido comprobar, un año más, cómo las formas y los gestos de un día tan señalado se van diluyendo, minimizando, cuando no transformando en algo diferente.
Hoy han vuelto a sonar los acordes de la Internacional. Pero, en un intento de convertir el rito en un acto creativo, o de cambiar el sentido estético del acontecimiento, o de disimular la apatía generalizada, o de camuflar la ausencia de puños al aire, los organizadores tuvieron la idea de sustituir el cántico colectivo por una interpretación individual al violonchelo. Podían haber usado una gaita, una guitarra o un saxo tenor, pero ¿hay un instrumento más melancólico que el violonchelo?
Ni el capitalista más maquiavélico podría haber inventado una forma mejor para desactivar el tono reivindicativo de la celebración y reemplazarlo por una pieza musical con aroma a réquiem.

1 comentario:

Anónimo dijo...

...Ni el capitalista más maquiavélico podría haber inventado una forma mejor...
¿estás seguro?
¿que tal la internacional maquinera?
http://es.youtube.com/watch?v=d8_DzO7lzRE